UNSL: la toma seguirá durante el fin de semana
La medida que fue optada por estudiantes autoconvocados bajo la premisa de “defender la educación pública”, continúa.
La toma por tiempo indeterminado en la Universidad Nacional de San Luis va por el tercer día y se llegó a la conclusión que continuará durante el fin de semana.
La idea fue impulsada por estudiantes de diferentes carreras el miércoles pasado por la tarde. Los principales argumentos giran en torno al reclamo por la “desfinanciación” de las universidades y en apoyo a los docentes universitarios y su situación salarial.
Para esta jornada se realizó una clase pública para expresar la “preocupación” por la educación pública. También se hizo una olla popular y una panfleteada con información alusiva.
Mara, una estudiante que participa de la medida, en diálogo con elchorrillero.com informó que el próximo lunes se reagruparán con la mirada puesta en lo que suceda en la reunión paritaria convocada por el Gobierno nacional. Allí dispondrán de seguir o no con la toma.
“No se agota la lucha en la recomposición salarial sino también sobre el presupuesto de las universidades que ya se ha agotado”, sostuvo.
Pero dentro del rectorado, lugar central de estas actividades, surgió una polémica entre las agrupaciones estudiantiles.
Según denunció públicamente el movimiento Franja Morada, fueron “expulsados” de la toma sin dejar que sus integrantes participen de la medida.
Un miembro del espacio le contó a este medio que “el resto de las agrupaciones, e incluso el sindicato de ADU votaron por echarnos”.
“Nos acusan de actuar de ser infiltrados, de estar de acuerdo con las iniciativas del Gobierno nacional y con el rector (Félix Nieto). No nos dejaron participar”, comentó.
Se prevé que en las próximas horas Franja Morada emita un comunicado al respecto.
Por otro lado, los docentes seguirán con el paro la próxima semana. El gremio de Conadu Histórica definió no reanudar las clases y ratificó la marcha nacional universitaria para el 30 de agosto.
La última oferta del Gobierno fue un incremento del 15%, pero fue rechazada por los sindicatos ya que exigen el 30%.